Un banquete de belleza gracias a la revista Diners.

¡Hola! Este es un post muy especial. Quiero compartir con ustedes, una de las experiencias más enriquecedoras que he tenido la fortuna de vivir recientemente. Hace un par de meses fui invitada por la revista Diners a participar en una nueva sección llamada La Charla, un experimento cultural y literario en donde un grupo de personas especialistas en temas diversos y muy diferentes entre sí, se reúnen para discutir un tema especifico a través de un libro reconocido, conducido por el librero David Roa y en medio de lo que se podría definir como un delicioso banquete platónico.

Para esta ocasión el tema a discutir era la belleza y el libro elegido fue "La historia de la belleza" de Umberto Eco, sin duda uno de los escritores y ensayistas más reconocidos del siglo XX.

Así fue como Diners reunió en una misma mesa a una artísta plástica y anfitriona de la noche (Ana María Devis junto a su esposo), a una coleccionista de arte y artista del estilo (Gloria Saldarriaga), a un cirujano plástico (Luis Felipe Mora), a un Chef (Alejandro Cuellar), a un sociólogo y escritor (Armando Silva, que además estudió con Umberto Eco), a un psiquiatra (Luis Fernando Orduz) y a mi, una publicista especialista en moda y por supuesto una chica gorda que no se limita a lo que la industria se empeña a mostrarnos que es bonito y que no lo es.

La mesa

Fue una noche llena de mucho aprendizaje, cada uno de los asistentes expuso su criterio de lo que es la belleza no sólo a desde lo que han aprendido profesionalmente, también desde sus experiencias personales y recuerdos más preciados. Sin duda todos tuvimos apreciaciones muy distintas de lo que es la belleza, pero llegamos a la conclusión unánime que la belleza no es una sola, y que radica más en los ojos del espectador que en el mismo objeto o individuo expuesto. La belleza se esconde entre muchas cosas, hablamos de la muerte porque la muerte puede ser bella. También de cómo mientras somos niños, nuestro criterio de lo que es hermoso y lo que no lo es, es tan distinto al que tenemos cuando somos adultos. En algún punto de nuestro crecimiento, perdemos esa pureza conceptual con la que nacimos y nos unimos a un imaginario colectivo.

Esa noche tuve la grata compañía de mi talentoso amigo Andrés Espinosa, el cuál tomó estas bellas fotos que hoy puedo compartir con ustedes. Los invito a leer el artículo completo aquí :)

En definitiva fue una experiencia mágica porque además de pasar un momento muy agradable, tuve la oportunidad de conocer a todas estas personas, grandes conocedores en sus oficios y sobretodo individuos muy cautivantes y con mucho que compartir y contar.

Espero les guste :)

FAT PANDORA

El chef Alejandro Cuéllar nos cautivó con cada uno de sus platillos,
todos servidos en bellos platos realizados por el mismo con materiales de una cantera.